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Manuales de Procedimientos y Práctica Obrera: Una tensión enriquecedora
Aranciaga Ignacio.
CTS+I, vol. 1, núm. 3, 2003, pp. 23-75.
  ARK: https://n2t.net/ark:/13683/pzvf/msO
Resumen
Describir y analizar un sistema técnico implica indagar acerca de las diferentes características culturales, organizacionales y técnicas que lo definen a partir de la acción de los agentes del proceso productivo. Desde esta premisa, las orientaciones y perspectivas que se propone desarrollar este trabajo son las de generar un marco de comprensión de las diferentes resignificaciones presentes en un sistema técnico petrolero situado en la zona del Golfo de San Jorge, en la Patagonia argentina, e interrogar acerca de un modo de interpretar la “eficiencia tecnológica” como la única posibilidad presunta de aplicación técnica, en una acepción que no tiene en cuenta las dimensiones económicas, sociales y políticas de los agentes del proceso productivo. En las poblaciones establecidas en la zona del Golfo de San Jorge se registra una crisis que no sólo es productiva o tecnológica, sino social y económica. Uno de los motivos por los cuales aún no se han encontrado respuestas satisfactorias para una salida a la crisis, es que se ha reiterado el diagnóstico en que la crisis se debe al cambio en el paradigma tecnológico. La elección del tema tiene por objeto poder comprender la complejidad de la relación entre sistema técnico y cultura tecnológica incorporada en las prácticas socio-técnicas petroleras. Se busca indagar sobre la triple dimensión que presenta la práctica tecnología: su carácter organizacional, su carácter cultural y su carácter técnico propiamente dicho. Se ha entendido a la tecnología en una concepción artefactual o instrumentista; esto es, considerando a las tecnologías como herramientas o artefactos construidos para una diversidad de tareas. Desde esta conceptualización, el factor fundamental del desarrollo tecnológico sería la difusión de innovación. Se ha concebido a ésta como la fuerza del cambio, y serían las máquinas las que deben deciden sobre la organización. Desde este lugar la tecnología le es extraña al hombre y queda inmovilizado y sin posibilidad de interacción o respuesta frente a ella. En igual sentido, si la tecnología fuera considerada en el sector petrolero como ciencia aplicada, esto equivaldría a reducirla a un conjunto de “reglas tecnológicas”; a su vez, las reglas tecnológicas serían consecuencias deducibles de las “leyes científicas” y, por lo tanto, el “desarrollo tecnológico” dependería de la “investigación científica”. De esta manera, nuevamente se alejarían las respuestas de salida de la crisis del conjunto de la población, depositándolas en el conocimiento científico. Esto traería como consecuencia generar una “caja negra de la tecnología”, donde los saberes expertos serían patrimonio de una elite y no podrían ser socializados con el conjunto de los operarios de menores calificaciones. Alternativamente, desde un enfoque sistémico se considera que el factor fundamental del desarrollo tecnológico es la innovación social y cultural, la cual involucra no solamente a las tradicionales referencias al mercado, sino también a los aspectos organizativos, y al ámbito de los valores y de la cultura. Este enfoque nos habilita a poder pensar a la tecnología como un sistema de relaciones en el cual estamos involucrados.
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